miércoles, 10 de diciembre de 2008

ARTICULAN ACCIONES CON VECINOS PARA COMBATIR EL VANDALISMO

Con el objetivo de contrarrestar el vandalismo que asola en las plazas y espacios verdes de la ciudad, y a los fines de lograr colaboración en el mantenimiento y cuidado de los mismos, la municipalidad de la Capital, a través de la Dirección de Espacios Públicos, está articulando acciones con los vecinos de los distintos barrios, propiciando su participación en las iniciativas y proyectos, y promoviendo la concientización y sentido de pertenencia.
La directora de Espacios Públicos, arquitecta Celia Romaña, dijo que son las zonas residenciales las más perjudicadas y lamentó que en esos sectores la gente “no las cuida a las plazas, no se involucra”. Asimismo, respecto al arbolado urbano, afirmó que existe “muchísimo más vandalismo en los sectores periféricos y avenidas que en el casco histórico, y esto deriva en que hay que realizar tareas de permanente reposición”.
Romaña, expresó que “el vandalismo, en el caso de los espacios verdes es diferente a lo que sucede con el arbolado. Nosotros hemos podido notar que no es difícil ponerse de acuerdo y lograr el interés de los vecinos de las zonas a veces más humildes de la ciudad; la gente en los barrios se involucra en general con sus espacios verdes, su plaza, lo valora, tiene sentido de pertenencia y está dispuesto a colaborar con la municipalidad en el mantenimiento y cuidado del espacio verde”.
Consignó que “con un trabajo previo que sirve para ponernos de acuerdo, conocernos y definir responsabilidades con los vecinos, en los espacios verdes que hemos construido en los barrios a través del programa con participación vecinal es muy poco el vandalismo que hemos tenido, y diría que prácticamente no existen robos de plantas; en cambio hemos trabajado en algunos sectores, que son más residenciales y donde, justamente, hemos mejorado los espacios verdes por estar muy cercanos al casco histórico o sino sobre corredores viales importantes, y lamentablemente la gente en esas zonas no las cuida a las plazas, no se involucra, no tiene sentido de pertenencia”.
“O sea que el vandalismo es mayor en barrios que no son los más alejados ni los más humildes. Un espacio emblemático, es la plaza Huaira Tawa, una plaza enorme, de más de dos hectáreas, ubicada en los barrios 920 viviendas y Potrerillo, que ya desde la época en que se estaba construyendo sufría actos de vandalismo, roturas, descuido o robos”, acotó. Refirió también que “hemos estado trabajando en forestación en los márgenes de los arroyos, pero tenemos muchos problemas a causa del vandalismo; llevamos unos tres o cuatro años que venimos colocando arbolado en los bordes de los arroyos y sobre todo los que están con menos parquización, la gente pasa y los quiebra o rompe, entonces es una tarea que no se termina nunca porque no llegan a prosperar los árboles.
“Un agravio al espacio de todos”
En ese contexto, observa que los actos de vandalismo “los sufren más las construcciones que los espacios verdes, es como que los autores lo hacen con ánimo de destruir y muchas veces la mala educación ciudadana lleva a que sean considerados como ‘travesura’, entonces escribir la reja de la plaza 25 de Mayo con corrector es una ‘travesura’, pero no se repara en que se está cometiendo un agravio al espacio de todos”.
Asimismo, comentó que “los placeros que tenemos no pueden evitarlo porque ellos cumplen su horario, hacen sus tareas de limpieza, riego, cuidado de las plantas, pero no están todo el día”. Empero, en el combate al vandalismo y la preservación de las plazas y espacios verdes “a partir de la tarea mancomunada, asumiendo responsabilidades compartidas entre la municipalidad y los vecinos” en el cuidado y mantenimiento de los mismos, la funcionaria consideró que “se ha avanzado muchísimo en estos cinco años”, percibe “con mucha satisfacción” que la gente esté “muy contenta de que las plazas tengan flores, que estén cuidadas, que se las vea lindas” y ve que la comunidad “se va sumando a esto”.
“Es un trabajo lento”, reflexiona. Recuerda inmediatamente que “cuando empezamos a poner plantas, el robo o daño era inmediato; en Catamarca, como consecuencia del clima y lo difícil que resulta mantener una planta viva y que crezca, eso era recurrente, y a medida que ha ido pasando el tiempo es como que la gente se ha ido acostumbrando a ver las plantas en las plazas, valora que estén ahí porque se ven bien, se ven lindas y es como que ha habido un cambio de actitud importante en ese sentido”.
Está convencida que “el secreto para que las personas cambien en general su actitud y sus hábitos con respecto al espacio público, es justamente invertir, mantenerlas limpias y cuidadas, pero esto lleva su tiempo”.
“Muchos actos de vandalismo en los espacios públicos responden no a que no exista sentido de pertenencia o educación cívica, sino que están poniendo de manifiesto otro tipo de problemas, son conductas de índole social y que tiene otro origen, diferente, y de los cuales los espacios públicos son víctimas; son otros problemas los que se están manifestando”, concluye.