jueves, 28 de mayo de 2009

EN LOS ÚLTIMOS CINCO AÑOS LA CIUDAD INCORPORÓ MAS DE VEINTE MIL ÁRBOLES

En los últimos cinco años, a través de un metódico plan de forestación ejecutado por la municipalidad, la capital de Catamarca ha incorporado más de veinte mil árboles. En ese mismo contexto, la Dirección de Espacios Públicos ha venido realizando el diagnóstico en distintos sectores de la ciudad, que tiene como finalidad la paulatina reconversión del arbolado. Los trabajos de forestación que se han realizado hasta ahora abarcaron a todos los sectores de la ciudad, incluidos los nuevos barrios. El plan de acción prevé, además, incorporar arbolado en aquellos terrenos que no están urbanizados.
“La necesidad de mayor forestación existe, sobre todo en aquellos terrenos que actualmente no están urbanizados, porque los barrios nuevos tienen su forestación; en general, en su amplia mayoría, ya venimos relevando los barrios nuevos de la ciudad y todos tienen la forestación; no nos olvidemos las miles de viviendas que se han hecho en los últimos diez o quince años, lo que explica que en muchos casos haya una forestación incipiente y todavía no cuentan con ejemplares arbóreos de importancia”, comentan desde Espacios Públicos.
Basándose en que “uno de los problemas más graves es la forestación inadecuada”, después de las sucesivas campañas de forestación que se han venido haciendo durante los últimos cinco años, “en las que se han incorporado más de veinte mil árboles a la ciudad”, esa área ha realizado un relevamiento de los distintos sectores de la ciudad para “empezar a trabajar en una paulatina reconversión del arbolado”.
Explican que “mucha gente es reticente a que se extraiga los árboles, a nosotros también nos cuesta muchísimo tomar la decisión, pero cuando hablamos de reconvertir la idea es ir plantando el ejemplar que va a reemplazar al árbol que a lo mejor dentro de tres o cuatro años sabemos que lo vamos a tener que sacar”.
“Hay algunos árboles que no solamente están haciendo daños importantes en las veredas y pavimento, sino que además plantean situaciones de riesgo para las viviendas inmediatas, o sea que planteamos la extracción no porque el árbol sea un poco grande o una especie que no es la contemplada en el plan director, sino que hablamos de situaciones de riesgo”, amplían. En ese sentido, evalúan que lo importante es el trabajo de mantenimiento del arbolado “porque no es solamente plantar árboles y regarlos, sino que después hay que mantenerlos con podas y controlando el crecimiento”.
Vandalismo
A la par que resaltan el arbolado lineal en los barrios “donde la forestación existe en altos porcentajes, con más del 80% de las cuadras forestadas”, consideran que hay que poner más énfasis en “contar con cordones de arbolados en espacios verdes importantes, como el Parque Adán Quiroga, los márgenes de los arroyos, que pueden tener macizos o barreras, y lo mismo en el sector sur de la ciudad”.
“Hemos estado trabajando en forestación en los márgenes de los arroyos, pero tenemos muchos problemas a causa del vandalismo; llevamos unos tres o cuatro años que venimos colocando arbolado en los bordes de los arroyos y sobre todo los que están con menos parquización, la gente pasa y los quiebra o rompe, entonces es una tarea que no se termina nunca porque no llegan a prosperar los árboles”, cuentan.
Con relación al arbolado urbano, puntualizan la existencia de “muchísimo más vandalismo en los sectores periféricos y avenidas que en el casco histórico, y esto deriva en que hay que realizar tareas de permanente reposición”, y detallan que “hemos incorporado una importante cantidad de árboles, la totalidad en la ciudad debe estar alrededor de los sesenta mil ejemplares; en cinco campañas de forestación, entre 2004 y 2008, se han plantado alrededor de veinticinco mil árboles, entre arbolado lineal y espacios verdes”.
Consignan la disponibilidad de un registro abierto permanente “porque más allá de la campaña de forestación anual que la hacemos en cuatro meses, donde se planta el grueso de los árboles, durante los otros ocho meses recepcionamos inquietudes de los centros vecinales o grupos de vecinos de las que vamos tomando nota, preparando documentación y demás para incorporarlas en la campaña de forestación del año siguiente”.
Refieren que el año pasado “hemos trabajado más en el sur, ha habido más demanda en el sur; lo que pasa que en los dos o tres años anteriores habíamos trabajado más en el sector norte por considerar que los vientos por lo general vienen del norte, es como que impacta más en el resto de la ciudad”.
“De la misma manera que en el plan director se ha tenido como factor condicionante en la elección de las especies la capacidad de adaptarse al clima que tenemos, también en el caso de ejemplares de arbustos ornamentales producimos justamente plantas como farolitos, lantanas, durantas, es decir plantas que se adaptan bien a la zona nuestra, y estamos trabajando con arbustitos por estaca y con ejemplares forestales”, añaden.
Vivero municipal
En materia de producción, a través del vivero propio, la municipalidad de la Capital apunta a la producción de ejemplares forestales y arbustivos porque “son los más caros, lo podemos hacer con menos mano de obra y que además es el insumo que más consumimos”, afirman desde Espacios Públicos.
Al respecto, señalan que en el vivero municipal producen “por lo menos parte de los insumos con los que después trabajamos, que sería el caso de las plantas o ejemplares, los árboles, forestales, arbustos, plantines florales, que una buena parte las producimos nosotros y las usamos en los espacios verdes y para las campañas de forestación anual, que una parte se provee del vivero municipal”.

sábado, 2 de mayo de 2009

Corredores viales, platabandas y rotondas con más flores, plantas y espacios verdes

La municipalidad de San Fernando del Valle de Catamarca, a través de la Dirección de Espacios Públicos, está llevando adelante diversas acciones en los corredores viales, las platabandas o distribuidores de tránsito y las rotondas.
Las tareas se ejecutan en el marco de las políticas del municipio orientadas a la recuperación y apertura de espacios verdes, cuya superficie tratada, desde que comenzó la gestión al frente de la intendencia del doctor Ricardo Guzmán, casi se ha triplicado en comparación con la existente en el 2003.
En los corredores viales es donde mayormente se está poniendo el acento, considerando que en los mismos se produce un importante movimiento de gente y tráfico vehicular, teniendo en cuenta también que por allí circulan los turistas que visitan Catamarca o están de tránsito con destino a otro punto del país.
Consideran las autoridades municipales que, configurando un punto de referencia determinante en el conjunto de factores que contribuyen a lograr la mejor imagen de San Fernando del Valle, es muy importante que todos los corredores viales estén en condiciones, cuidados, limpios y en lo posible verdes y floridos porque ello favorece a la imagen de una ciudad limpia, cuidada, alegre y ordenada.
“Trabajamos mucho con los corredores viales, a algunos les falta la obra gruesa, tal es el caso del acceso sur de la ciudad, que es la avenida Hipólito Yrigoyen, y en esos casos solo hacemos mantenimiento porque hasta tanto no se ejecute la obra no podemos hacer mayores avances”, afirman. En el caso del acceso norte, más allá de que se ha ejecutado la obra de la avenida Presidente Castillo en forma conjunta con el gobierno de la provincia, el municipio de la Capital ha mejorado y rediseñado muchos de los espacios verdes y los mantiene permanentemente floridos y en buenas condiciones, lo cual exige una atención continua.
Además, entre otros emprendimientos, fue remodelada toda la rotonda en la que se erige el monumento a Felipe Varela, la rotonda del ex regimiento o Plazoleta del Inmigrante, la rotonda Güemes, todos los canteros de la avenida Mariano Moreno, emplazándose miles de plantas, árboles y la colocación de césped.
“Sobre la avenida Mariano Moreno, durante prácticamente tres años consecutivos, pusimos entre doscientas y trescientas plantas, hasta en un momento le poníamos durantas pero después desistimos porque eran sustraídas, y fuimos completando los espacios vacíos con otras especies más rústicas y menos apetecibles para ser sacadas como la antana, pero también muy bonitas”, cuentan desde Espacios Públicos. Y resaltan con énfasis que “hoy por hoy son muy pocos los espacios que están requiriendo la colocación de plantas”.